LA CRÓNICA DEL PARTIDO DE AYER SEGÚN ANRES

EL ANRES GANÓ SOBRE LA BOCINA Y ACABÓ ROTO FÍSICAMENTE
Una victoria con la lengua fuera

CRÓNICA
ANRES 50 - Villaverde del Río 49

Una canasta de Manu Cortada a falta de cuatro segundos para acabar el encuentro dio la victoria al CB ANRES en un vibrante partido de baloncesto que, ante todo, fue de guante blanco por la deportividad mostrada por uno y otro conjunto. VIllaverde del Río venía con la ilusión de disputar un partido que desde hacía semanas se estaba preparando. Hasta diez jugadores llegaron a la cancha anresista, que por fin volvía a ver a su equipo, tras una temporada obligada en Rochelambert.
El CB ANRES, por contra, se topó de nuevo con un cúmulo de imprevistos, algo que parece santo y seña de esta entidad. Por razones la mayoría de ellas justificables, se fueron cayendo de la lista todos los jugadores del plantel. Hasta tal punto que, al igual que ocurrió con el amistoso ante los FARSOS del pasado verano, el entrenador Salva Lao se tuvo que vestir de corto para que, al menos, hubiera alguien de refresco en el banquillo. Esas carencias obligaron a los jugadores a realizar un sobreesfuerzo físico que estuvo a punto de costarles la victoria.
Pese a este panorama, el conjunto azurillo salió enchufado al encuentro, en un primer cuarto con aportación anotadora de todos los integrantes del quinteto (Salva, Manu, Borja, Manolín y Kiko) para dejar el primer parcial 12-6 para los locales. En el segundo cuarto, sin embargo, los de Villaverde del Río le dieron la vuelta al encuentro, con la buena mano desde 6,25 de Juan y, sobre todo, la dirección de Sebas. Estos dos factores, unido a una mayor claridad defensiva, hicieron darle la vuelta a la tortilla al match, para dejar el marcador al descanso en 22-24.
El despertar del tándem Kiko-Manolín
Con las espadas en todo lo alto se produjo la resurrección de dos estrellas de las pachangas, pero segundos figuras en los encuentros. Kiko y Manolín, Manolín y Kiko, pusieron en jaque a la defensa rival, hasta el punto de que entre ambos, hicieron más del 60% de los puntos del equipo al finalizar el choque (16 puntos de Manolín por 15 de Kiko). Ese ritmo de exigencia en la anotación por parte de este dúo privó a los de Villaverde del Río que pudieran ponerse arriba en el marcado (37-33).
El último cuarto fue un ejemplo claro de la tónica de todo el choque: igualdad, igualdad y más igualdad. Pero con una rémora para los anresistas, que estaban con la lengua fuera, a excepción de Manolín, que seguía haciendo bien sus funciones de palomero oficial del reino. Con el cansancio a cuestas se jugó hasta llegar a un final épico. A falta de 37 segundos para el final, pitan una falta a favor del ANRES, que Iñaki acierta a encestar los dos tiros libres para colocar cuatro arriba la ventaja. En un ataque rápido, los de Villaverde anotan de la mano de Kiri y, en el saque de fondo, roban el balón para que Sebas establezca el empate. Ahí empezaron los nervios: los locales fallaron la canasta y, seguidamente, cometieron una falta sobre el base, que encestó una de los tiros desde la línea de personal.
A sólo 11 segundos para el final llegó la jugada del partido. Saque desde medio campo que recibe Manu Cortada, que logra tirar pero no encesta. Afortunadamente el rebote fue palmeado por Iñaki y llegó de nuevo al base anresista, que a la segunda no falló. Sólo quedaban dos segundos y ni un intento a la desesperada de anotar desde el centro del campo por parte de los de Villaverde del Río pudo variar el marcador. Al final, un tanteo de 50-49 que deja a las luces la igualdad de los dos equipos y que hay que trabajar mucho para llegar en buena forma a nuestra competición: el Torneo de Primavera.